Imagen con fines ilustrativos. (CRH).
Una nueva normativa que entró en vigor el año pasado provocó una disminución en la importación y venta de cocinas eléctricas en el país.
La reducción la confirmaron el Servicio Nacional de Aduanas (SNA) del Ministerio de Hacienda y las cadenas de almacenes Gollo/Unicomer y Grupo Monge.
Según datos de Aduanas, en 2023 se importaron 89.950 cocinas y hornos de resistencia eléctrica al país. Esta cifra bajó a 58.069 en 2024.
“El Servicio Nacional de Aduanas no puede determinar cuál es la razón de la disminución en la importación de este tipo de mercancías; es parte de la dinámica del comercio nacional e internacional”, señaló en respuesta a una consulta hecha por CR Hoy.
Sin embargo, Randall Morales, desarrollador de categoría de Línea Blanca de Gollo/Unicomer, explicó que desde octubre de 2024 se implementó una nueva nota técnica que regula la eficiencia energética de una familia de productos eléctricos, como cocinas, plantillas de empotrar, hornos de empotrar y plantillas de inducción.
Aseguró que muchos fabricantes no tuvieron tiempo de obtener las certificaciones de sus productos para poder importarlos al país.
“Desde octubre hasta enero se ha experimentado una escasez de estos productos y se espera poder nivelar los inventarios a partir de marzo y abril, ya que muchos fabricantes, una vez que sus productos obtuvieron la certificación, tuvieron que reprogramar sus líneas de producción para cumplir con la alta demanda de pedidos que no fueron atendidos hasta no estar seguros de que el producto se podría comercializar”, detalló.
Agregó que, debido a la menor importación de cocinas eléctricas, la venta de productos de gas aumentó en un 20 %, lo que ha sido insuficiente para poder cumplir la alta demanda.
“Nuestra compañía, además de sufrir la falta de inventario de productos eléctricos, también sufrió con los productos a gas”, mencionó.
El Grupo Monge también confirmó que desde 2024 entró en vigor una normativa sobre la certificación de artículos eléctricos de cocción, que incluye cocinas, hornos y plantillas eléctricas.
“Previo al inicio de este proceso, logramos contar con suficientes inventarios con el propósito de darle tiempo a las diferentes marcas para que puedan cumplir con este requisito. Este proceso de certificación se ha llevado de manera gradual”, afirmó.
Agregó que en sus tiendas no ha habido desabastecimiento debido a la planificación, pero reconoció que el flujo de productos certificados por las marcas no ha estado al mismo ritmo y que se proyecta que se normalice en los primeros meses del año.
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Alexánder Ramírez
