Katarzyna Dacyszyn, una reconocida modelo y diseñadora de lencería en Polonia, sufrió durante más de una década el acoso de un hombre que la vigilaba, le enviaba mensajes amenazantes y difundía información falsa sobre ella. Si bien, pasó hace bastantes años, en redes sociales se ha viralizado la historia.
A pesar de que pidió ayuda, las autoridades minimizaron el peligro. En 2016, el acosador la atacó con ácido en un tribunal, provocándole quemaduras graves en el 80% de su rostro.
Todo comenzó en 2005, cuando Katarzyna recibió un extraño mensaje de un hombre que le declaraba su amor de manera obsesiva. Con el tiempo, la situación empeoró: el acosador, que vivía en su mismo edificio, empezó a crear perfiles falsos para hostigarla, la llamaba constantemente y publicaba información falsa sobre su vida en internet.
Aunque Katarzyna buscó ayuda, psicólogos y policías le aseguraron que él no representaba un verdadero peligro. Sin embargo, en 2016, cuando ella terminó una relación, las amenazas se volvieron más intensas. Asustada, decidió denunciarlo ante la justicia.
El 22 de agosto de 2016, Katarzyna acudió a un tribunal en Łódź para enfrentar legalmente a su acosador. Mientras esperaba en un pasillo, el hombre se acercó y le arrojó ácido sulfúrico en el rostro.
El químico quemó su piel de inmediato, afectando su ojo derecho, su pecho y parte de su torso. La ambulancia tardó 40 minutos en llegar, lo que agravó el daño. Los médicos determinaron que tenía el 25 % de su cuerpo quemado y que su rostro estaba afectado en un 80 %.
Katarzyna pasó meses en un hospital especializado en quemaduras, donde se sometió a múltiples cirugías y tratamientos para intentar reconstruir su piel y salvar su visión. Sin embargo, el daño fue irreversible.
A pesar del trauma, decidió seguir adelante. Publicó el libro Kobieta z Blizną (La mujer con la cicatriz), donde cuenta su historia, y se convirtió en activista contra el stalking (acoso persistente) y la violencia de género. Además, trabaja en talleres para ayudar a otras víctimas y comparte su proceso de recuperación en redes sociales.
El caso de Katarzyna generó indignación en Polonia y llevó a cambios en las leyes sobre acoso. Su agresor fue condenado a 25 años de prisión, y las autoridades reforzaron los controles de seguridad en los tribunales.
Hoy, Katarzyna continúa su lucha para que ninguna otra mujer tenga que pasar por lo mismo. En sus redes sociales, envía mensajes de esperanza y recuerda la importancia de denunciar a tiempo.
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Source
Argerie Vargas
