El martes 25 de junio el padre Sergio Valverde recibió de manos de la ministra y presidenta ejecutiva del Instituto Mixto de Ayuda Social (IMAS), Yorleny León, la certificación de organización de bienestar social para la Asociación Obras del Espíritu Santo.
Este reconocimiento se otorgó durante el inicio de la construcción de los Albergues Juveniles de la Alegría Torres Espíritu Santo, un proyecto destinado a brindar apoyo a jóvenes en situación de vulnerabilidad.
El evento, sin embargo, no estuvo exento de controversias. El padre Sergio aprovechó la ocasión para expresar su sentir sobre los ocho años de dificultades que enfrentó la asociación, años en los que el gobierno estuvo bajo la bandera del Partido Acción Ciudadana (PAC).
“Dios habla por el que calla, ocho años nos cerraron las puertas, ocho años nos maltrataron, cuando fuimos a pedir pan nos trataron como si fuéramos delincuentes” afirmó, denunciando el trato recibido en administraciones anteriores.
En respuesta a estas críticas, la exdiputada Paola Vega defendió los controles y auditorías realizadas a la asociación.
“Nadie le ‘echó’ nada, bajémosle a la conspiranoia. Son los controles legales que debe seguir toda persona que recibe y maneja fondos públicos. Si no le gusta, es facilísimo: que deje de recibirlos”, comentó Vega.
Además, señaló que en todas las auditorías realizadas se encontraron irregularidades, y recordó que estos procesos están establecidos en las normativas como parte de los mecanismos de control interno y fiscalización.
El presidente de la República, Rodrigo Chaves, también se pronunció sobre el tema, acusando a los gobiernos de Luis Guillermo Solís y Carlos Alvarado de perseguir al padre Sergio Valverde debido a su fe en Dios.
No obstante, Vega subrayó que las auditorías son procedimientos normales en la gestión de fondos públicos y no responden a motivaciones personales.
*Con información de El Mundo CR.
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Redacción
