Publicado: mayo 8, 2024
En las bulliciosas calles de Costa Rica, es habitual encontrarse con automóviles y motocicletas que emiten sonidos estridentes al acelerar, todo para llamar la atención y destacar entre la multitud.
Para algunos conductores, un motor ruidoso es sinónimo de potencia y estatus, pero esta percepción está muy alejada de la realidad, y puede acarrear problemas graves.
La empresa alemana Dekra, responsable de la inspección técnica de vehículos en el país, emite una advertencia crucial al respecto.
Según Dekra, cuando se percibe una alteración en el sonido del escape de un vehículo, se debe proceder a medir los decibelios que emite, siguiendo las regulaciones establecidas.
El Manual de Inspección de COSEVI establece que, para automóviles con un peso inferior a 3,5 toneladas y no motocicletas, el máximo permitido es de 96 dB. En el caso de motocicletas, vehículos y microbuses con pesos entre 3,5 y 8 toneladas, el límite es de 98 dB. Y para vehículos que superen las 8 toneladas, el tope es de 100 dB. Sobrepasar estos límites constituye una falta grave.
Source
Redacción