Publicado: enero 21, 2025
Un llamado a la austeridad y la ética en la política
El exdiputado del Partido Liberación Nacional (PLN), Wagner Jiménez, ha emitido un llamado público a los precandidatos Carolina Delgado y Gilbert Jiménez para que renuncien a los beneficios institucionales que les otorga su cargo como diputados. Entre estos, destaca la asignación mensual de 500 litros de combustible y el uso de vehículos oficiales.
La solicitud se centra en promover una conducta ética y transparente de cara al electorado en el contexto de la actual campaña política. Según Jiménez, el uso de estos recursos públicos para actividades proselitistas generaría una ventaja desleal frente a otros aspirantes y contradice los principios de austeridad que deberían guiar a quienes buscan liderar el país.
Beneficios cuestionados: el uso de gasolina y vehículos
De acuerdo con el artículo 5 de la Ley 7.352, los diputados tienen derecho a una cuota mensual de 500 litros de combustible para uso discrecional en vehículos. Sin embargo, tanto la Procuraduría General de la República como un criterio técnico de la Asamblea Legislativa han señalado que este beneficio debe tener una “naturaleza funcional”. Esto significa que su uso debe limitarse exclusivamente a actividades relacionadas con sus labores parlamentarias y no puede destinarse a otros fines, como campañas políticas.
El exdiputado también instó a los precandidatos a solicitar permisos sin goce salarial ante el Departamento de Recursos Humanos de la Asamblea Legislativa, de modo que puedan enfocarse en sus actividades de campaña sin recurrir a recursos públicos.
Compromiso para el futuro: un uso más responsable de los recursos
Además de su llamado a la renuncia inmediata de estos beneficios, Jiménez propuso que, en caso de que los precandidatos lleguen a la Presidencia, se comprometan públicamente a no utilizar el vehículo oficial para desplazamientos personales, como traslados desde sus hogares a sus despachos.
En un documento al que este medio tuvo acceso, Jiménez enfatizó:
“Es necesario predicar con el ejemplo desde la temporalidad del poder. Los recursos públicos no deben ser utilizados para actividades políticas ni personales. Esto no es ético, moral ni correcto”.
El exdiputado señaló que esta acción sería un gesto de respeto hacia el electorado y una forma de garantizar que no se utilicen fondos públicos para crear ventajas indebidas durante la campaña.
Debate en la opinión pública
La propuesta ha generado opiniones divididas en redes sociales y círculos políticos. Mientras algunos ciudadanos aplauden la iniciativa como un ejemplo de transparencia, otros cuestionan si la renuncia a estos beneficios podría impactar la efectividad de las funciones legislativas de los precandidatos.
La medida pone en evidencia el creciente escrutinio sobre el uso de recursos públicos por parte de los funcionarios, especialmente en periodos electorales.