
Publicado: mayo 28, 2025
Un nuevo epicentro para bandas de robo de vehículos
El cantón de Sarapiquí, en la provincia de Heredia, ha empezado a destacarse por un fenómeno preocupante: se ha convertido en una de las principales zonas de operación de grupos dedicados al robo de automotores. La reciente recuperación de dos vehículos sustraídos en diferentes puntos del país refuerza las sospechas de que el cantón está siendo utilizado como guarida y centro de operaciones por parte de bandas organizadas.
Según información oficial de la Fuerza Pública, ambos vehículos fueron ubicados gracias a una alerta ciudadana, lo que permitió su rápida localización y recuperación. Uno de los automóviles había sido robado en Cartago y el otro en Heredia, este último mediante la modalidad conocida como bajonazo, que implica el uso de violencia o intimidación para despojar a las víctimas de su carro.
Tres detenidos y una red bajo investigación
En el operativo participaron oficiales destacados en la zona norte del país, quienes lograron la captura de tres sospechosos: dos adultos de 22 y 26 años y un menor de edad. Todos fueron remitidos al Ministerio Público, donde se les investiga por su presunta vinculación con una organización criminal dedicada al robo y desmantelamiento de vehículos.
Las autoridades ya habían puesto atención sobre Sarapiquí, tras al menos tres casos recientes en los que se localizaron automotores reportados como robados en esta región. Uno de los hechos más mediáticos ocurrió semanas atrás, cuando fue hallado en un taller mecánico de la zona el camión del cantante costarricense Erick León, que ya estaba siendo desarmado.
Cifras que encienden las alarmas: casi 2.000 robos en 2025
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) ha contabilizado 1.891 vehículos robados en Costa Rica en lo que va del año, lo que representa un desafío urgente para las autoridades de seguridad pública. Si bien los casos se distribuyen en todo el país, existe una creciente preocupación por el uso de zonas rurales como refugio y punto de distribución de partes robadas.
La modalidad más común sigue siendo el bajonazo, aunque también se reportan robos mientras los vehículos están estacionados, incluso en zonas residenciales. El OIJ ha solicitado a los conductores mayor precaución, así como la instalación de sistemas de rastreo GPS y el uso de dispositivos de seguridad adicionales.
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