La Organización Mundial de la Salud (OMS) realizó una edición especial de la actualización epidemiológica sobre la COVID-19, lo cual que ofrece una visión general de la situación desde que se notificó la enfermedad por primera vez hace casi 5 años.
De acuerdo con la OMS, el virus que causa la enfermedad, circula en gran medida sin una estacionalidad clara y sigue infectando, causando una enfermedad aguda grave y un estado posterior a la COVID-19.
Además, hallaron que el impacto varía según el país, y que la capacidad de la OMS para monitorear la circulación, la gravedad y la evolución del virus se ve comprometida por la reducción de la vigilancia, las pruebas y la secuenciación, y la integración limitada en los programas de prevención a largo plazo.
Desde el inicio de la pandemia hasta el 10 de noviembre de 2024, se notificaron a la OMS más de 776,8 millones de casos confirmados de COVID-19 y más de 7 millones de muertes confirmadas en 234 países.
La mayoría de las muertes asociadas a la COVID-19 ocurrieron en 2020, 2021 y 2022, y el aumento de la inmunidad condujo a una disminución significativa de las muertes. En el último período de 4 semanas, del 14 de octubre al 10 de noviembre de 2024, 77 países notificaron casos de COVID-19 y 27 muertes a nivel mundial.
En general, las admisiones en UCI por cada 1.000 hospitalizaciones han estado disminuyendo desde el pico en julio de 2021, cuando la tasa fue de 245 por 1.000 hospitalizaciones, cayendo por debajo de 132 por a principios de 2022 y a menos de 69 por 1.000 hospitalizaciones a fines de 2023.
A principios de 2024, hubo un aumento de las admisiones en UCI por cada 1.000 hospitalizaciones, aumentando a más de 191 en marzo y disminuyendo a 108 por a principios de noviembre de 2024.
Mientras tanto, las muertes por cada 1.000 hospitalizaciones mostraron una disminución constante desde junio de 2021, cuando alcanzaron 253 , hasta un nivel bajo de 59 en agosto de 2023.
En 2024, la tasa ha seguido disminuyendo y ha alcanzado 41 muertes por cada 1.000 hospitalizaciones a principios de noviembre de 2024.
La enfermedad pos-COVID-19 (ECP), llamada por algunos “ECP prolongada”, sigue representando una carga importante para los sistemas de salud, y se estima que un 6 % de las infecciones sintomáticas por SARS-CoV-2 dan lugar a síntomas de ECP.
Si bien la grave es un factor de riesgo importante, más del 90 % de los casos de ECP surgen después de una leve debido al gran volumen de infecciones.
Source
Ambar Segura