Casona histórica ubicada en el interior de la propiedad. Foto tomada de: Fundazoo
El Ministerio de Ambiente y Energía (Minae) y el Sistema Nacional de Áreas de Conservación (Sinac) presentaron la propuesta para crear el Parque Natural Urbano (PANU) Lorne Ross, en los terrenos estatales donde está ubicado el Centro de Conservación de Santa Ana.
Este medio accedió a una presentación hecha semanas atrás por Meryll Arias Quirós, directora a.i. del Área de Conservación Central del Sinac, sobre las intenciones gubernamentales para con la propiedad. El documento, de 18 páginas, no cita en ningún extremo el proyecto impulsado por la diputada oficialista Pilar Cisneros Gallo, respaldado por el ministro Franz Tattenbach, para crear una atracción con fuentes de agua inspirada en el Circuito Mágico del Agua existente en Lima (capital de Perú).
La propiedad, de 52 hectáreas, fue donada al Estado desde 1976 por el ciudadano Lorne Ross Ashey con el objetivo de que se enfocara en tareas de conservación y resguardo del ambiente en beneficio de la comunidad de Santa Ana. El terreno fue administrado durante 20 años por la Fundación Proozológicos (Fundazoo) y regresó a control estatal el 10 de mayo de 2024.
Existe una pugna entre los planes del Minae y la diputada oficialista Pilar Cisneros, quienes abogan por la creación de un Parque Natural Urbano (PANU) con fuentes de agua temáticas en el sector norte de la propiedad, y la propuesta planteada desde hace varios años por un grupo de vecinos para que se constituya un parque administrado por la Municipalidad de Santa Ana con fines de uso recreativo, turístico, cultural y didáctico.
El espíritu del plan vecinal fue recogido en el proyecto de ley 22.645, presentado en marzo de 2023 por habitantes del cantón, con el respaldo del Partido Liberal Progresista (PLP). No obstante, la discusión de la propuesta está obstaculizada luego de que la legisladora Cisneros presentara 50 mociones contra la iniciativa.
Los PANU son áreas geográficas ubicadas dentro de zonas urbanas, que poseen ecosistemas terrestres y costeros de valor escénico, biológico, recreativo y ecoturístico, cuya importancia radica en la necesidad de proteger y conservar su biodiversidad. Así lo definió el decreto ejecutivo 42742-Minae publicado en 2021.
Según Arias Quirós, la propiedad tiene una cobertura forestal actual de 29,1 hectáreas y 25,7 hectáreas de pastos. Incluso, en 6,4 hectáreas del inmueble existe un humedal.
“Alta importancia del sitio dentro del contexto urbano, ya que constituyen los últimos relictos de hábitat natural para especies con distribución restringida al Valle Central, incluyendo individuos de especies en peligro de extinción, con poblaciones amenazadas y endémicas”, indicó la funcionaria en el documento.
Arias detalló que la propuesta del PANU tiene dictamen positivo del Centro Científico Tropical (CCT) del ACC y del Consejo Regional del Área (Corac) de la ACC. Además, indicó que existe un informe técnico legal de la Dirección de Asesoría Jurídica (DAJ) que avala el procedimiento usado para la creación del PANU.
El acuerdo del Consejo Nacional de Áreas de Conservación (Conac) para la constitución del PANU detalla de manera general que la “administración se llevará a cabo en función de la disponibilidad de los recursos humanos y financieros adecuados” y que “asimismo, se solicita a la directora regional a.i. del ACC promover alianzas con otros sectores para facilitar la gestión de los recursos naturales en la mencionada área protegida”. De nuevo, no se cita nada referente a la intención para construir fuentes de agua en el terreno.
Arias repasó los puntos a destacar sobre el terreno:
Alberga una estructura declarada patrimonio arquitectónico nacional y objetos antiguos de gran importancia.
Recoge una historia local relevante para comprender lo que hoy en día es el cantón de Santa Ana, correspondiendo a un invaluable patrimonio cultural inmaterial.
Los espacios de educación ambiental y recreación incrementan los beneficios sociales y comunitarios del sitio.
El lugar cuenta con una visitación regular por parte de centros educativos y amantes de la naturaleza.
A partir del 2006, se gesta un movimiento ciudadano que ha sido apoyado por el Concejo Municipal, para que el sitio sea convertido en un Parque Natural Urbano Lorne Ross.
Juan José Vargas, alcalde de Santa Ana y María Paula Villarreal, presidenta del Concejo Municipal. Captura de pantalla/Facebook
Carta de intención
El Concejo Municipal de Santa Ana conoció este 23 de diciembre una carta de intención remitida por el Minae y el Ministerio de Cultura y Juventud (MCJ) “para el desarrollo de un modelo de gestión y gobernanza en el Centro de Conservación de Santa Ana”.
“En consonancia con las competencias del Minae se conformará un equipo técnico con el ACC del Sinac, el proyecto PNUD-TEVU-OET-GEF y representantes asignados de las instituciones aquí firmantes para desarrollar el plan de gestión y gobernanza. Así como el plan maestro y proyectos específicos para ser construidos de acuerdo con un plan de inversiones a efectos de tener un criterio técnico que permita orientar las decisiones de las instituciones firmantes”, leyó en la sesión Juan José Vargas, alcalde de Santa Ana.
El Minae y la Municipalidad de San José el 24 de octubre la firma de una carta de intenciones para “desarrollar un modelo de gestión y gobernanza en el parque Simón Bolívar (antiguo zoológico)”. La intención del gobierno es que ahí se cree el primero de los PANU, el cual se complementaría luego con el PANU del INBioparque en Santo Domingo de Heredia y el PANU de Santa Ana.
La carta de intenciones, que incluye al MCJ, apunta a que buscarán “identificar proyectos y actividades de conservación y disfrute de la naturaleza, recreación, culturales y educativas, en el contexto josefino, para acercar a la población y a los turistas a una experiencia ambiental novedosa y participativa, en una zona urbana”.
El ministro Tattenbach admitió el 8 de octubre a la Comisión de Ambiente de la Asamblea Legislativa que solicitó $30 mil para realizar los estudios preliminares sobre la construcción de las fuentes de agua en el sector norte de la propiedad bajo el “plan integral” del PANU Lorne Ross. El espacio destinado para este fin contemplaría aproximadamente 8 hectáreas de la propiedad.
Los análisis se contrataron a la firma costarricense Black Waters, con fondos aportados por el Proyecto Transición hacia una Economía Verde Urbano (TEVU) de la Organización de Estudios Tropicales (OET), para el desarrollo de un anteproyecto.
Ante los diputados, Tattenbach reveló que el plan de las fuentes de agua fue puesto sobre la mesa de discusión por la diputada Cisneros Gallo durante una “conversación”. En principio, había dicho que estaba contenido en el plan de gobierno que propuso Rodrigo Chaves durante la campaña presidencial en el proceso electoral de 2022.
Diseños preliminares del proyecto de las fuentes de agua. Black Waters/Minae
La intención de Cisneros, acuerpada por el Minae, es que se construyan al menos 7 fuentes alusivas a temáticas costarricenses o precolombinas. El proyecto pretende replicar el Circuito Mágico del Agua existente en Lima, Perú. Ciudad natal de la diputada oficialista.
El ministro insistió ante los legisladores que con las fuentes de agua buscan que el terreno contemple una “parte dedicada a la recreación”.
“El agua para las fuentes va a salir del agua que hay ahí en la zona. Se va a hacer reciclado (…) De los pozos que hay ahí, de pozos inscritos. No se gasta el agua”, defendió, sin titubeos, Tattenbach.
El ministro alegó que la gestión de la propiedad amerita disponer de recursos económicos, los cuales no tienen la cartera y la Municipalidad de Santa Ana. Por eso, considera que las fuentes de agua con fines “recreativos” podrían generar ingresos a partir de la operación de entes privados.
El Concejo Municipal de Santa Ana y un grupo de vecinos respaldan el proyecto de ley expediente 23.645 denominado “Ley de Creación del Parque Natural Urbano Lorne Ross como motor para el desarrollo social y económico sostenible para Santa Ana”. La propuesta comunal no cuenta con el respaldo del Minae.
De manera general, la intención es que el Centro de Conservación de Santa Ana se convierta en un parque natural urbano administrado por la Municipalidad de Santa Ana y no por el Minae. Tampoco contempla las fuentes de agua en el sector norte del terreno.
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Pablo Rojas
