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Tanto nadar para morir en la orilla.
Esa popular frase aplica a la perfección para el Deportivo Saprissa, que esta noche en La Cueva, por más que luchó hasta el final, quedó eliminado y oficialmente entrega su corona de campeón.
En un gran juego, en medio de una fría noche en San Juan de Tibás, morados y florenses bajaron el telón de la final de segunda ronda.
Saprissa cumplió, ganó su partido, pero el marcador de 2-0, no fue suficiente, ya que en el juego de ida habían recibido una estocada, que terminó siendo mortal.
Y es que, Herediano vivió de la renta y al final con un global de 2-3, es que se clasifican para la Gran Final Nacional, donde buscarán su ansiada estrella número 30.
Goles, emociones y celebraciones
El juego no decepcionó y arrancó con una doble tapada de Esteban Alvarado que lo convirtió en héroe.
Herediano estuvo cerca de silenciar La Cueva, pero el guardameta se hizo enorme bajo palos.
Tras esa acción, el juego se tiñó por completo de morado y los goles no tardaron en llegar.
Kendall Waston, quien dejó sus labores defensivas y se convirtió en un delantero más, fue quien rompió el cero.
Al minuto 34, con un certero remate de cabeza dentro del área logró enviar el balón al fondo de las redes y metió de lleno a los morados en la serie.
Antes de irse al descanso, nuevamente con Waston como protagonista llegó el segundo.
El espigado zaguero peleó un balón y en la frontal del área recibió una falta que terminó traduciendo en gol, Mariano Torres al 48´.
Herediano a la Gran Final
Esa anotación cayó como un balde de agua fría para Jafet Soto y compañía, quienes sentían que se les escapaba la serie.
Sin embargo, lograron recomponer para evitar que el daño fuera mucho mayor y con esto frenaron el ímpetu de los tibaseños.
Ya el cierre fue de infarto, pero la historia del juego se había escrito y Herediano pese a la derrota terminó celebrando en casa ajena un boleto que los ilusiona con ser campeones.
Ahora los florenses, se citan con Liga Deportiva Alajuelense (LDA), en busca de un título que se les ha negado en los últimos años a ambos.
Source
Adrián Mendoza