Dentro de unos días habrá llegado el momento. En el congreso del organismo rector del fútbol mundial que se celebrará el 17 de mayo en Bangkok, capital de Tailandia, los 211 miembros de la FIFA decidirán qué país albergará el próximo Mundial de Fútbol femenino.
En la última Copa del Mundo, celebrada en Australia y Nueva Zelanda, participaron por primera vez 32 selecciones, una cifra que se mantendrá en el Mundial de 2027. En esa ocasión, España ganó el título de campeona del mundo.
¿Qué países son candidatos?
En un principio, hubo tres candidaturas para organizar la Copa Mundial Femenina de 2027, pero a finales de abril, Estados Unidos y México -que querían organizar conjuntamente el torneo-, se retiraron. Eso dejó únicamente dos opciones: Alemania, Países Bajos y Bélgica, con una candidatura conjunta y, por otro lado, Brasil.
“Creo que podemos ofrecer un Mundial con una infraestructura y una organización excelentes, con distancias cortas a las sedes y la perspectiva de un muy buen rendimiento financiero, que beneficiará el desarrollo mundial del fútbol femenino”, declaró la directora de Deportes de la Federación Alemana de Fútbol (DFB), Nia Künzer.
Alemania, que ya albergó la Copa Mundial Femenina en 2011, ha designado como sedes para los partidos las ciudades de Gelsenkirchen, Dortmund, Düsseldorf y Colonia.
¿Qué posibilidades tiene la candidatura europea?
La candidatura conjunta de Alemania, Holanda y Bélgica sufrió un revés a principios de mayo. En el informe de evaluación de la FIFA, el trío europeo recibió 3,7 puntos de 5 posibles, mientras que su competidor, Brasil, obtuvo 4,0 puntos en la evaluación técnica. Mientras que en el análisis de riesgos, el diseño de las tres federaciones europeas obtuvo una puntuación mejor o igual en casi todos los aspectos, Brasil se llevó la palma en el subapartado de estadios, condiciones marco contractuales y documentos de apoyo de parte del Estado.
El informe es sólo una recomendación para los miembros votantes de la FIFA. En el pasado, incluso, las Copas Mundiales masculinas se han concedido en contra la mejor calificación. No obstante, Brasil parte como favorito de cara a la votación del próximo viernes.
En la edición de 2023, el Consejo de la FIFA sí siguió la recomendación de este informe, adjudicando las sedes del torneo a Australia y Nueva Zelanda.
¿Sigue siendo posible un Mundial en Europa?
“Estaríamos preparados para un Mundial en el corazón de Europa que promoviera a las mujeres y el fútbol femenino, fuera sostenible y pusiera a los aficionados en el centro”, dijo la ministra alemana del Interior, Nancy Faeser, en referencia a la final de la Copa Femenina de Alemania, en la que se agotaron las entradas en el partido que disputó el Bayern Múnich y el VfL Wolfsburgo.
A pesar del revés causado por el informe de evaluación de la FIFA, Países Bajos, Bélgica y Alemania siguen esperando un resultado positivo cuando se tome la decisión en Bangkok. “Todos lo esperamos con impaciencia”, señaló Faeser.
(aa/ers)