El Vaticano ha anunciado este jueves 23 de mayo que el Papa Francisco ha aprobado la canonización del joven italiano Carlo Acutis, conocido como el “apóstol del Internet”. Acutis, fallecido en 2006 a los 15 años, ha sido proclamado santo gracias a un milagro atribuido a una costarricense al borde de la muerte hace dos años.
La Conferencia Episcopal de Costa Rica (Cecor) confirmó esta noticia, celebrando el reconocimiento del milagro que involucró a Valeria Valverde, una joven estudiante que sufrió un grave accidente de bicicleta en Florencia, Italia. Valverde fue diagnosticada con un traumatismo craneoencefálico muy grave, con una esperanza de supervivencia casi nula.
Durante su tratamiento en el hospital Careggi, la madre de Valeria, Liliana, rezó fervientemente a Carlo Acutis. El 8 de julio de 2022, Liliana se dirigió a Asís para dejar una carta en la tumba de Acutis, pidiendo su intercesión. Milagrosamente, al día siguiente, Valeria comenzó a mostrar signos de recuperación, y el 18 de julio una tomografía computarizada confirmó la desaparición de la hemorragia. Para el 11 de agosto, Valeria fue trasladada para iniciar un proceso de rehabilitación.
Carlo Acutis, beatificado en 2020 por la curación milagrosa de un niño con malformación congénita del páncreas, ahora será canonizado por el Papa Francisco. Acutis, un adolescente devoto de la Eucaristía y de la evangelización a través de internet, ha sido un referente de fe para muchos jóvenes.
El presbítero Mario Segura Bonilla, secretario de la Conferencia Episcopal, expresó la alegría y entusiasmo de que Costa Rica sea nuevamente noticia por la intercesión de un milagro. “Es un día de gran celebración para la Iglesia y para nuestra comunidad”, afirmó.
Este es el segundo milagro atribuido a la intercesión de un santo relacionado con una costarricense. En 2013, el Vaticano aprobó la canonización del Papa Juan Pablo II tras la curación de Floribeth Mora de un aneurisma cerebral.
La historia de Carlo Acutis, quien murió a causa de leucemia, sigue inspirando a jóvenes en todo el mundo. El “apóstol del Internet” es ahora un símbolo de esperanza y fe para todos aquellos que buscan consuelo y milagros en tiempos de desesperación.
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Redacción
