Fragmentos de cráneo humano descubiertos en el norte de España son el rostro más antiguo de Europa Occidental, según revelaron científicos este miércoles (12.03.2025).
Los restos, datados entre 1,1 y 1,4 millones de años de antigüedad, se cree que pertenecen a una especie más cercana al primitivo Homo erectus. Durante una excavación en 2022, los científicos recuperaron fragmentos del lado izquierdo del rostro de un adulto en la cueva Sima del Elefante en Atapuerca, a unos 140 kilómetros al sur de Bilbao.
El fósil ‘Pink’: un hallazgo revolucionario en Atapuerca
Estos fósiles abarcan el 80 por ciento de la cara media izquierda de un individuo adulto, incluyendo partes del pómulo y la mandíbula superior con la estructura nasal, y se encuentran entre los restos humanos más antiguos conocidos de Europa. Los investigadores apodaron al fósil “Pink”, en honor a la banda Pink Floyd.
Para su estudio, los científicos reconstruyeron meticulosamente los fragmentos óseos combinando técnicas tradicionales de conservación con herramientas avanzadas de imagen y análisis 3D. El análisis reveló que Pink no pertenecía al Homo antecessor (especie identificada en otras áreas de Atapuerca), sino a un homínido más primitivo, con una cara media más proyectada y masiva, que mostraba similitudes, pero también diferencias con el Homo erectus, considerado el primer humano que migró desde África.
Fósiles podrían representar antigua especie humana desconocida
Estos hallazgos confirman que Europa Occidental estuvo poblada por al menos dos especies de homínidos hace más de un millón de años. María Martinón, directora del Centro Nacional de Investigación sobre la Evolución Humana y una de las investigadoras principales, destacó que las características faciales de Pink eran notablemente primitivas, particularmente en su estructura nasal plana y subdesarrollada.
Ante la insuficiencia de evidencia para una clasificación definitiva, los científicos adoptaron el nombre provisional Homo affinis erectus, reconociendo sus afinidades con el Homo erectus pero dejando abierta la posibilidad de que pertenezca a otra especie.
“Estos hallazgos abren una nueva línea de investigación en el estudio de la evolución humana en Europa, ya que introducen un nuevo actor en la ocupación temprana de Europa”, dijo la arqueóloga Rosa Huguet del Instituto Catalán de Paleoecología Humana y Evolución Social (IPHES-CERCA) de España, autora principal del estudio publicado en la revista Nature.
“Cuando tengamos más restos fósiles, podremos decir más sobre esta especie”, señaló Huguet.
Evolución humana en Europa
Para contextualizar el descubrimiento, los investigadores señalan que nuestra especie, el Homo sapiens, no apareció hasta hace aproximadamente 300.000 años en África, mientras que el Homo erectus surgió hace unos 1,9 millones de años, también en África, con proporciones corporales ya similares a las modernas.
Junto a los restos de Pink se descubrieron herramientas simples de cuarzo y sílex, así como huesos de animales con marcas de corte que indican actividades de carnicería, aunque el género del individuo sigue sin determinarse.
El descubrimiento representa un hito importante para la comprensión científica del asentamiento humano en Europa, dijo Marina Mosquera, directora del IPHES-CERCA.
“Es crucial para entender nuestros orígenes, y este nuevo descubrimiento consolida aún más la posición de Atapuerca como líder mundial en el estudio de la evolución humana”.
“Hay muchas preguntas por responder, y este hallazgo ayuda a escribir una nueva página en la historia de la evolución humana”, concluyó, por su parte, José María Bermúdez de Castro Risueño, paleoantropólogo y codirector del Proyecto Atapuerca.