La Caja Costarricense de Seguro Social (CCSS) decretó este martes un estado de emergencia institucional como respuesta a la creciente renuncia de médicos especialistas, situación que ha generado una crisis en los hospitales públicos del país. Esta medida busca implementar acciones inmediatas que garanticen la continuidad de los servicios de salud y salvaguarden la atención a los pacientes.
Decisión unánime y medidas adoptadas
En una sesión extraordinaria de la junta directiva de la CCSS, con la presencia de seis de sus miembros, se aprobó por unanimidad la declaratoria de emergencia por un período inicial de seis meses, que abarca del 3 de diciembre de 2024 al 3 de junio de 2025, con posibilidad de prórroga si la situación no mejora.
Entre las medidas acordadas, destacan:
1.Declaratoria de emergencia institucional: Permitirá a la CCSS actuar con mayor rapidez en la implementación de estrategias para mitigar el impacto de las renuncias.
2.Solicitud al Ministerio de Salud: Se pidió que este declare una emergencia nacional para acceder a recursos extraordinarios y coordinar con otras instituciones como el Instituto Nacional de Seguros (INS) y colegios especializados.
3.Plan de acción inmediato: Se instruyó a la gerencia administrativa, en conjunto con el Centro de Emergencias y Desastres, a presentar una hoja de ruta con medidas concretas en la sesión del jueves 5 de diciembre.
Impacto en los hospitales
Hasta el 3 de diciembre, las renuncias de especialistas ascienden a 84, con el Hospital México siendo el más afectado con 19 bajas. Según las autoridades de la CCSS, esta situación representa un riesgo crítico para la salud y vida de los pacientes, lo que ha motivado la búsqueda de apoyo adicional del gobierno y entidades privadas.
Una crisis que requiere estrategias a largo plazo
Laura Ávila, presidenta ejecutiva de la CCSS, señaló que la declaratoria de emergencia es apenas el inicio de un proceso complejo que requerirá “múltiples estrategias y planes de contención”. La posibilidad de declarar una emergencia nacional, a cargo del Ministerio de Salud, sería clave para habilitar recursos financieros y humanos que permitan atender la crisis de forma más integral.
Contexto y desafíos
La renuncia masiva de especialistas responde a múltiples factores, entre ellos la carga laboral, falta de incentivos y mejores oportunidades en el sector privado. La situación refleja una necesidad urgente de reformas estructurales en el sistema de salud público para evitar que la crisis se agrave.
