
Publicado: abril 11, 2025
Mientras gran parte del país mantendrá la venta de licor abierta durante la Semana Santa, dos municipios decidieron marcar la diferencia y aplicar la Ley Seca. Se trata de Cartago y Turrialba, que optaron por restringir la venta de bebidas alcohólicas en fechas clave, apelando a sus tradiciones religiosas y al respeto por los actos litúrgicos.
En Cartago, la medida será tajante durante el Viernes Santo, 18 de abril, y se extenderá por un periodo de 24 horas. Por su parte, Turrialba aplicará la restricción de forma más puntual: solo durante el tiempo que duren las procesiones religiosas en su cantón.
Según explicó Karen Porras Arguedas, directora de la Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL), esta decisión responde a la autonomía municipal que permite a cada ayuntamiento regular el consumo y la venta de licor de acuerdo con las necesidades y valores de su comunidad. Esta facultad está contemplada en el Artículo 26 de la Ley de Regulación y Comercialización de Bebidas con Contenido Alcohólico, que faculta a las municipalidades a actuar en este tipo de casos.
La ley autoriza a los gobiernos locales a restringir el consumo de alcohol durante actividades cantonales específicas, como desfiles, actos cívicos o procesiones, siempre dentro de un área determinada. En caso de incumplimiento, los comercios podrían enfrentar multas que oscilan entre uno y diez salarios base, lo que en 2025 se traduce en montos que van desde ¢462.200 hasta ¢4.622.000, dependiendo de la gravedad de la falta.
Estas acciones reafirman el papel protagónico que juegan las municipalidades en proteger las tradiciones y el orden público en sus comunidades, especialmente en fechas tan sensibles como la Semana Santa, donde la espiritualidad y el respeto cobran especial relevancia.
Si pensabas darte una vuelta por Cartago o Turrialba durante estos días, mejor revisá bien los horarios y preparate con tiempo: en estos cantones, las reglas cambian y el licor desaparece, aunque sea por unas horas.