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Fernando Ramírez Mejía el sujeto de 45 años, sospechoso de descuartizar y enterrar en un bananal en Pococí, Limón a Juliana Idania Diermissen Noel, deberá descontar 6 meses más de prisión preventiva mientras afronta un eventual juicio. Así lo dictó el Juzgado Penal de la zona.
La investigación por este femicidio inició en noviembre del 2023, cuando el dueño de la casa en la que estaba viviendo Juliana y su pareja, llamó a la Fuerza Pública para alertar sobre la desaparición de ella.
Según el reporte en ese entonces, en el patio de la casa se sentía un mal olor, así que de inmediato se realizó una inspección en la propiedad.
Las autoridades del Organismo de Investigación Judicial (OIJ) encontraron que el hombre habría enterrado a la mujer en la casa y luego sacó su cuerpo para colocarlo en otro lugar. Según trascendió, el sospechoso intentó esconder las pruebas, quemó los indicios y pintó la casa.
Fue el pasado lunes 1 de abril que el OIJ explicó cómo se hallaron restos de Juliana. Las diligencias se realizaron en una finca bananera donde el hombre cavó fosas para enterrar el cuerpo.
Los agentes hicieron dos excavaciones. En una de ellas encontraron bolsas plásticas con rastros de sangre, las cuales habrían sido usadas para trasladar partes del cuerpo de la víctima desde la vivienda donde fue asesinada.
Se cree que el crimen fue cometido por Ramírez el 29 de octubre porque fue la última vez que Juliana se comunicó con sus familiares.
El sospechoso fue detenido el miércoles 27 de marzo tras investigaciones de la sección de crimen organizado del OIJ de Guápiles. Luego, fue capturado en una finca ganadera en Orotina. Allí permanecía desde hace varios meses.
Inicialmente le impusieron 6 meses de prisión preventiva, medida cautelar que fue recientemente ampliada.
Según trascendió meses atrás, familiares de Juliana habían señalado que ella sufría de amenazas con machete y, además, supuestamente sufría de golpizas. Ella tenía siete meses de relación con Ramírez Mejía y se conocieron a través de las redes sociales.
Juliana tenía 39 años de edad y era madre de 3 hijos. El imputado al parecer se provocó varias lesiones en el cuerpo, principalmente en piernas y brazos, cuando quemó indicios para esconder las pruebas.
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Source
José Adelio Murillo
