
Imagen con fines ilustrativos
Publicado: abril 15, 2025
El OIJ mantiene abierta la investigación sobre el violento ataque que casi termina en tragedia en Belén de Carrillo. La víctima, de 49 años, fue declarada fuera de peligro tras ser trasladada al Hospital de Liberia.
Una noche de violencia en Belén de Carrillo
Lo que parecía una noche tranquila en el sector de Belén de Carrillo, Guanacaste, se convirtió en escenario de un violento ataque que dejó a un hombre gravemente herido, pero con una sorprendente oportunidad de sobrevivir.
Según datos preliminares del Organismo de Investigación Judicial (OIJ), la víctima fue identificada como un hombre de apellido Alfaro, de 49 años, quien recibió al menos ocho disparos en diferentes partes del cuerpo.
La secuencia del ataque: una emboscada a plena noche
El hecho se registró la noche del lunes, cuando dos sujetos, en apariencia caminando por las cercanías de la vivienda de Alfaro, abrieron fuego sin mediar palabra.
Los proyectiles impactaron principalmente en la espalda, ambos codos y la pierna derecha de la víctima, quien también presentaba una fractura en la extremidad inferior, según el informe preliminar.
A pesar de la gravedad de las heridas, Alfaro fue trasladado con vida al Hospital de Liberia, donde los equipos médicos lograron estabilizarlo. Actualmente se encuentra fuera de peligro, aunque bajo constante observación.
Posible disputa vecinal, en el centro de la investigación
Las autoridades judiciales han iniciado las diligencias correspondientes para esclarecer el móvil del ataque. De acuerdo con declaraciones de familiares, una posible rencilla entre vecinos podría estar relacionada con el violento suceso, aunque esta hipótesis todavía no ha sido confirmada.
El OIJ detalló que tras efectuar los disparos, los presuntos responsables abandonaron la escena a pie y, hasta el momento, se desconoce su paradero.
Un caso que evidencia el aumento de violencia en comunidades rurales
Este incidente vuelve a encender las alarmas sobre el creciente número de hechos violentos en zonas rurales de Costa Rica, donde en los últimos meses se han reportado situaciones similares que reflejan una preocupante escalada en la inseguridad.