Las autoridades del estado mexicano de Baja California (noroeste) dijeron este sábado que hay un “alto grado de probabilidad” de que tres cadáveres encontrados en un pozo sean de dos australianos y un estadounidense desaparecidos la semana pasada.
Si bien el avanzado estado de descomposición dificulta su identificación, hay elementos que permiten sostener que se trataría de ellos.
La fiscal María Elena Andrade declaró a periodistas que es posible, gracias “a su vestimenta y algunas características como el cabello largo y algunas descripciones físicas en específico”, pensar que se trata de los tres extranjeros.
Durante el proceso de rescate de los cuerpos se encontró un cuarto cadáver, pero las autoridades sostienen que estaba en el lugar desde hace mucho tiempo y no se relaciona con el caso de los surfistas.
Autoridades mexicanas, en colaboración con el FBI estadounidense y el consulado de Australia, investigan la suerte de los hermanos australianos Jake y Callum Robinson y su amigo estadounidense Jack Carter.
Los tres aficionados al surf, de entre 30 y 33 años, fueron vistos por última vez el 27 de abril en Bocana de Santo Tomás, destino turístico del municipio de Ensenada, en el estado de Baja California, fronterizo con Estados Unidos.
Zona peligrosa
La fiscal explicó que el pozo donde fueron hallados los cadáveres tiene más de 15 metros de profundidad y podría ser utilizado por criminales para ocultar los restos de sus víctimas. Sobre las líneas de investigación en torno a la desaparición de los jóvenes, la investigadora dijo que una de ellas es el intento de robo de la camioneta en la que viajaban.
Los turistas se habrían opuesto al ataque, por lo que habrían sido tiroteados y luego lanzados al pozo.
Hasta el momento tres personas han sido arrestadas por su presunta vinculación con el caso. Además, el vehículo con matrícula de California en que se transportaban los turistas fue encontrado totalmente incendiado en las cercanías.
En noviembre de 2015, dos surfistas australianos, Dean Lucas y Adam Coleman, fueron asesinados y sus cuerpos luego quemados cuando viajaban por el estado de Sinaloa (noroeste).
En marzo de 2023, presuntos miembros del Cartel del Golfo secuestraron a cuatro estadounidenses en la ciudad de Matamoros (Tamaulipas, fronterizo con Estados Unidos). Dos de ellos fueron asesinados.