Cinco personas vinculadas a una de las bandas criminales más grandes de Ecuador fueron condenadas por el asesinato del candidato presidencial Fernando Villavicencio que ocurrió el 9 de agosto de 2023.
Carlos Angulo, presunto líder de la banda Los Lobos, y Laura Castilla fueron sentenciados a 34 años y ocho meses de prisión por dirigir el golpe.
El tribunal de Quito condenó a dos hombres y una mujer a 12 años de prisión por ayudar a un escuadrón de sicarios en el ataque.
Los fiscales alegaron que Angulo –ampliamente conocido como El Invisible– ordenó el golpe desde el penal de Quito en el que cumple una condena de 54 meses por delitos de armas de fuego.
Negó los cargos y afirmó que lo estaban convirtiendo en un “chivo expiatorio” del golpe.
Según el tribunal, Castilla quedó a cargo de la logística del golpe. Supuestamente proporcionó armas, dinero y motocicletas a los hombres para que llevaran a cabo el ataque.
Los otros –Erick Ramírez, Víctor Flores y Alexandra Chimbo– fueron acusados de ayudar al escuadrón a rastrear los movimientos de Villavicencio.
Más de 70 personas prestaron testimonio durante el juicio, incluido un testigo clave que dijo que a la pandilla le ofrecieron más de US$200.000 para matar a Villavicencio.
Queda aún por investigar
El político y periodista de investigación, de 59 años, fue atacado a tiros a la salida de un acto electoral en Quito, días antes de que se celebrara la primera vuelta de las elecciones presidenciales en agosto del año pasado.
Villavicencio destapó varios escándalos de corrupción que salpicaron a altos funcionarios, incluidos algunos del gobierno del expresidente Rafael Correa (2007-2017).
Los comicios extraordinarios habían sido convocados luego de que el entonces mandatario, Guillermo Lasso, disolviera el Parlamento y pidiera elecciones, en las que finalmente triunfó en segunda vuelta el actual presidente, Daniel Noboa.
En las semanas previas a las elecciones, Villavicencio había recibido amenazas de muerte y se le había asignado un destacamento de seguridad.
Los fiscales dijeron durante el juicio que uno de los hombres involucrados en el asesinato murió a tiros en un enfrentamiento con la policía en el lugar.
Otros seis hombres de nacionalidad colombiana fueron detenidos en relación con el asesinato, pero posteriormente murieron en la prisión de El Litoral, donde se encontraban recluidos en prisión preventiva.
Los fiscales han dicho que sigue en curso una investigación aparte sobre quién contrató a Los Lobos para realizar el golpe.
La viuda de Villavicencio, Verónica Sarauz, celebró el fallo. Pero dijo que esto sólo marca el comienzo de un largo camino para esclarecer la historia detrás de la muerte de su marido.
Históricamente, Ecuador ha sido un país relativamente seguro y estable en América Latina, pero la delincuencia se ha disparado en los últimos años, impulsada por la creciente presencia de los carteles de la droga colombianos y mexicanos, que se han infiltrado en las bandas criminales locales.
