El porcentaje de aprobación, en undécimo año, pasó del 88,0% en 2021 al 82,3% en 2023.
Un informe de auditoría que realizó la Contraloría General de la República (CGR) revela una disminución en la cantidad de estudiantes que aprobaron el grado de noveno y undécimo año durante el 2023, tanto en liceos académicos como en rurales.
Según detalla el documento, en los colegios académicos el porcentaje de aprobación disminuyó del 71,2% en 2021 al 69,0% en 2023, mientras que en los liceos rurales se redujo del 83,2% al 76,0% en el mismo periodo.
“Tanto en la modalidad de colegios académicos como en los liceos rurales se determinó una disminución en los porcentajes de alumnos matriculados que aprueban el curso dentro del ciclo lectivo correspondiente”, detalla la CGR.
Del análisis de aprobación en noveno y undécimo año se obtienen los siguientes resultados: a nivel general, el porcentaje de aprobación en noveno año fue del 83,2% en 2021 y disminuyó al 79,1% en 2023. Mientras que en undécimo año, pasó del 88,0% en 2021 al 82,3% en 2023.
“Es importante destacar que los porcentajes de aprobación en liceos rurales, tanto en noveno como en undécimo año, son superiores a los de los colegios académicos”, detalla la CGR.
El informe también revela que las Direcciones Regionales Educativas (DRE) donde hay mayor cantidad de resultados de aprobación en noveno grado son en las direcciones de Puriscal y Los Santos.
No obstante, la DRE con menor nivel de eficacia en noveno grado son San José Central y San José Oeste.
“En cuanto a undécimo grado, los mejores resultados de aprobación corresponden a la DRE Peninsular, mientras que los de menor eficacia corresponden a las DRE San José Central y San José Oeste”, se lee en el documento.
Factores que influyen en los resultados de aprobación
De acuerdo con la vicedecana del Centro de Investigación y Docencia en Educación (CIDE) de la Universidad Nacional (UNA), Susana Jiménez, este decrecimiento en dichos resultados se deben a problemas multifactoriales.
Según detalló en entrevista con crhoy.com, la situación proviene no solo de un rezago educativo, sino también, por la brecha de desigualdad educativa, los cambios que se hicieron pospandemia y la situación económica actual que atraviesa el país.
Con estos resultados podemos afirmar que son multifactoriales, es decir, yo no podría pensar que solamente el rezago educativo sea el único elemento que esté interviniendo en relación con los resultados. Evidentemente el que el estudiantado haya pasado por la pandemia, estas brechas estructurales que siempre han tenido los liceos en zona rural y urbana, esa brecha que tiene los colegios técnicos versus los colegios académicos o los colegios privados versus los colegios académicos y los liceos rurales, digamos que viene por otras situaciones, además del asunto pandémico. Yo empiezo a sumar elementos y tenemos múltiples aristas que tenemos que analizar, explicó la vicedecana.
Según expuso, si hay problemas de infraestructura, si se están atendiendo muchos estudiantes por aula, si aunado a estos problemas hay docentes con poca capacitación y además hay familias con problemas económicos, todo esto se suma dentro de las causas que provocan que los estudiantes reprueben en el sistema educativo.
“Y al mismo tiempo como estudiantes hay problemas de salud mental y están alrededor de personas que tienen problemas de salud mental y estrés como los profesores, bueno, entonces más bien ¿cómo no tener unos resultados peores? Porque estamos sumando muchos factores que en lugar de mejorar el proceso educativo, por el contrario, están desmejorándolo y llevando una carga muy fuerte en relación, todos los actores que están ahí, familias, estudiantes y docentes”, detalló.
El porcentaje de aprobación en noveno año fue del 83,2% en 2021 y disminuyó al 79,1% en 2023
Diversificación de oferta educativa
La vicedecana expone que con los resultados de decrecimiento en la aprobación de los estudiantes, es necesario identificar los colegios académicos actuales y las zonas donde se ubican, para que a partir de los intereses de los estudiantes se establezcan centros educativos competentes a la necesidad actual del mercado y así “los estudiantes no van solo a estudiar, sino, que se les motiva en áreas donde ellos tengan habilidades”.
Si yo convierto un colegio académico en un colegio técnico que ofrece un título técnico para el mercado laboral actual, tengo que hacer una inversión significativa económica y lo que está pasando es que en lugar de tener más recursos en educación, cada día estamos con menos recursos. Para el 2025 proyectamos el presupuesto en educación más bajo de los últimos 10 años, ¿en qué momento se van a hacer las transformaciones que requieren los colegios de acuerdo con los lugares donde estén ubicados?
No estamos viendo como país la posibilidad de que la educación efectivamente transforme vidas, estamos viendo la educación como un gasto, estamos viendo como rebajamos el gasto al mínimo y no estamos respondiéndole a lo que la sociedad costarricense necesita y no le estamos respondiendo a los jóvenes que necesitan también pensar en su futuro y eso es lo más grave de todo esto, explicó.
Para revertir esta situación que dio a conocer la CGR, el Cide de la UNA hace un llamado urgente al Ministerio de Educación Pública (MEP) a adoptar medidas estratégicas.
Entre las acciones recomendadas, se incluyen:
Reformar el currículo para integrar habilidades técnicas y competencias críticas que fomenten el pensamiento analítico.
Aumentar la inversión en infraestructura y tecnología educativa, especialmente en las zonas rurales.
Mejorar la capacitación continua de los docentes para asegurar su preparación frente a los retos educativos actuales.
Fomentar la participación activa de las comunidades en el proceso educativo y asegurar recursos adicionales para estudiantes en situación vulnerable.
Además, detalló que aunque haya recomendaciones o ideas de qué hacer para mejorar los resultados en temas educativos, muchas de esas ideas requieren de inversión económica y si el Gobierno actual continúa recortando el presupuesto en educación “las ideas para mejorar la educación pública quedarán en nada”.
Yo podría decir que habría que revisar los currículos, cambiar la metodología, buscar que haya currículum completo también en los liceos rurales apoyados con tecnología, hay un montón de ideas, pero todas esas ideas ¿qué requieren? Plata, requieren presupuesto, requieren infraestructura, requieren condiciones mínimas para tener un aprendizaje y si eso no lo tenemos, entonces, pues las ideas quedarán ahí, en nada, agregó.
El Cide recalca que, sin una intervención estructural y sostenida, la brecha de desigualdad en el acceso a una educación de calidad se ampliará, lo que a largo plazo afectará la cohesión social y el desarrollo económico del país.
La necesidad de transformar el sistema educativo es urgente para asegurar que todos los estudiantes, sin importar su origen o ubicación, tengan las mismas oportunidades de aprendizaje y desarrollo, concluyó Jiménez.
Sobre este tema se consultó al MEP, sin embargo, al cierre de la nota no se ha obtenido una respuesta.
Source
Rachell Matamoros