Publicado: diciembre 25, 2024
Este miércoles 25 de diciembre, las celebraciones de las tradicionales fiestas de Zapote dieron inicio con gran afluencia de visitantes, pero también con varios problemas de orden vial. A pesar de ser feriado, oficiales de Tránsito realizaron operativos en los alrededores del campo ferial, retirando placas a varios vehículos que se encontraban estacionados de manera irregular.
Estacionar en la calle tuvo un alto costo
Muchos conductores optaron por estacionar sus vehículos en media calle o en áreas no permitidas, sin prever las consecuencias de esta decisión. Además, la situación se complicó por la presencia de cuidacarros informales que cobraban tarifas entre ₡5,000 y ₡10,000 a los automovilistas por “vigilar” sus vehículos, pese a no ofrecer ninguna garantía real sobre su seguridad.
Cuando los oficiales de Tránsito comenzaron a retirar placas, los cuidacarros se deslindaron de cualquier responsabilidad, dejando a los conductores solos frente a las consecuencias legales de su infracción.
Aplicando la ley en medio de las festividades
Los operativos de los oficiales se llevaron a cabo con el objetivo de mantener el orden y garantizar la fluidez del tránsito en las inmediaciones del campo ferial. Según el informe de las autoridades, varios vehículos estaban obstruyendo vías principales, lo que representaba un peligro tanto para peatones como para otros conductores.
“Entendemos que es un día festivo, pero eso no justifica el incumplimiento de la normativa de tránsito. Estacionar en lugares prohibidos pone en riesgo la seguridad de todos y afecta el flujo vehicular”, afirmó un vocero del cuerpo policial.
Consecuencias para los infractores
Además de la molestia de perder las placas, los propietarios de los vehículos deberán pagar una multa para recuperarlas. Este proceso implica trámites adicionales en las oficinas de Tránsito, lo que genera un gasto y una pérdida de tiempo que podría haberse evitado con un poco más de precaución.
Por otro lado, las autoridades recordaron que los cuidacarros informales no están autorizados para establecer tarifas ni garantizar la seguridad de los vehículos. En ese sentido, recomendaron a los asistentes a las fiestas buscar estacionamientos formales y regulados para evitar este tipo de inconvenientes.