Las peticiones para que el actual presidente de Estados Unidos, Joe Biden, no continúe en el camino a la candidatura demócrata para las próximas elecciones, vienen de su propio partido.
El congresista demócrata por California, Jared Huffman, ha liderado la intención de atrasar la votación virtual para nominar formalmente a Biden. De hecho, recientemente dijo a la cadena CNN que “si las elecciones se celebraran hoy, lo aplastarían”.
A él se le suman una lista de legisladores del partido, como Mike Levin, también por California, Adam Smith por Washington y Susan Wild por Pennsylvania, entre otros.
Incluso el expresidente Barack Obama le ha pedido a Biden reconsiderar sus aspiraciones.
Desde el inicio del mandato, y de manera más intensa durante los últimos meses, se ha visto a un Biden menos en control de sus palabras y acciones durante las actividades públicas.
Esto se encrudeció durante el debate que sostuvo contra el expresidente Donald Trump, el pasado 27 de junio. Una encuesta realizada por el Centro AP-NORC para la Investigación de Asuntos Públicos reveló que siete de cada 10 estadounidenses piensan que Biden debería retirarse; por el contrario, medios internacionales indican que la imagen de Trump se fortaleció tras el debate y el atentado sufrido el sábado 13 de julio.
Pese a lo anterior, el mandatario no ha dado señales, hasta el momento, de retirarse de sus aspiraciones para un segundo mandato.
Para el analista y consultor político del estadounidense Affila Group, Andrés Pazmino, la fortaleza de Biden hoy recae en su experiencia política, con décadas en el senado estadounidense y ocho años como vicepresidente, acompañando al exmandatario Obama.
Sin embargo, indica que ya no se trata de quién ha sido Biden en el pasado, sino de lo que pueda hacer a futuro.
“Su edad y habilidades cognitivas; su actuación en el debate, que fue muy pobre, intensificó el concepto de que Biden no tiene las habilidades cognitivas para durar cuatro años más. Ya se hablaba de eso y el debate lo solidificó”, agregó.
El exportavoz de Obama y de la congresista Nancy Pelosi, Federico de Jesús, le dijo a Teletica.com que el Partido Demócrata está en una crisis. Indicó que el atentado contra Trump silenció temporalmente un movimiento que iba creciendo para pedirle al presidente Biden que se hiciera a un lado de su candidatura presidencial.
“Eso se cayó por unos días, ahora regresa el movimiento para desbancarlo, con encuestas internas que salen a luz pública sobre las posibilidades de algunos otros demócratas que podrían ganarle a Donald Trump, que es el objetivo del Partido Demócrata”, aseveró De Jesús.
El también analista demócrata afirmó que existe una división interna en el partido sobre si el presidente Biden debería permanecer o retirarse de la candidatura.
“Sigue siendo como una nube sobre el partido que ostenta la Casa Blanca y el Senado de los Estados Unidos”, añadió.
Por su parte, Pazmino afirmó que, en este momento, es poco probable que el Presidente se haga un lado con relación a la candidatura y que llegue una nueva figura, en especial porque ya ha recaudado más de 200 millones de dólares para su campaña y ese es un dinero que, según explicó, únicamente podría utilizar Biden o, en su defecto, la actual vicepresidenta, Kamala Harris.
“Tendría que recabar fondos desde el inicio y a cuatro meses de las elecciones es poco realista. El Presidente no ha dado ninguna señal, independientemente de que hay gente en el Partido Demócrata que ha llamado a que se retire”, subrayó Pazmino.
Pero si la presión llegara al nivel de que el mandatario se retirara para darle un espacio a Harris, Pazmino indicó que esto sí podría representar una amenaza para Trump.
“Una reciente encuesta de NBC News indicó que Kamala podría ganarle a Trump por un 2%, claro, eso sigue estando dentro del margen de error; pero entonces Kamala sí es un poco más fuerte que Biden. Kamala Harris como candidata sería algo histórico: primera mujer y primera mujer de color, y eso sería utilizado como incentivo para que la gente vaya a votar”, concluyó Pazmino.