La calma del proceso electoral interno del Partido Liberación Nacional (PLN) se vio interrumpida por un episodio de tensión que involucró al expresidente Óscar Arias Sánchez y al entorno político de uno de los precandidatos. En medio del incidente, el presidente del PLN, Ricardo Sancho, se pronunció de forma contundente, marcando un claro distanciamiento con el comportamiento del aspirante Gilberth Jiménez.
Durante una conferencia de prensa este domingo, Sancho no titubeó al expresar su molestia:
“Deploro profundamente el comportamiento innecesario del precandidato Gilberth Jiménez, a quien defendí semanas atrás, pero que hoy, lamentablemente, ha traspasado una línea que no podemos permitir.”
¿Qué ocurrió con Óscar Arias?
El incidente se produjo cerca del mediodía, cuando el Premio Nobel de la Paz acudió a ejercer su voto en el proceso interno del PLN. Al llegar a las urnas, fue recibido por un grupo de simpatizantes de Gilberth Jiménez, quienes —en medio de gritos— le exigieron abandonar lo que denominaron “la cúpula del poder”.
“¡Fuera de la cúpula!”, coreaban algunos, en una escena que generó incomodidad y cuestionamientos sobre el respeto dentro del proceso democrático interno del partido.
Aunque Arias no respondió públicamente en el momento, la tensión no pasó desapercibida y motivó una rápida reacción por parte de la dirigencia.
Sancho: “La institucionalidad debe respetarse”
Ricardo Sancho subrayó que el respeto a las figuras históricas del partido es indispensable, independientemente de las diferencias ideológicas o generacionales.
“Las contiendas internas deben celebrarse en un ambiente de respeto y unidad. Podemos disentir, pero no podemos permitir que el irrespeto o la descalificación se normalicen, menos cuando vienen dirigidas a alguien que ha representado al país con tanto peso internacional como lo ha hecho el doctor Arias”, agregó.
¿Qué implica esto para Gilberth Jiménez?
Aunque el precandidato no ha emitido un pronunciamiento formal tras las declaraciones de Sancho, el episodio podría tener consecuencias dentro del proceso liberacionista, especialmente al tratarse de un evento electoral que buscaba demostrar cohesión partidaria.
Por ahora, la atención está puesta en si Jiménez se disculpará o si continuará firme en su postura de confrontar el liderazgo tradicional del PLN, una estrategia que parece dividir tanto a las bases como a los líderes históricos del partido.
