Los conservadores alemanes de Friedrich Merz y el partido de centro-izquierda SPD anunciaron el sábado haber alcanzado un acuerdo de principio para formar un gobierno que prevé una inversión masiva para relanzar y rearmar la primera economía europea.
“Hemos redactado un documento común y llegado a un acuerdo sobre una serie de cuestiones”, declaró el futuro canciller conservador ante la prensa.
Añadió que la próxima semana probablemente comenzarán las negociaciones detalladas que llevarán a la formación de un nuevo ejecutivo.
“Todos estamos convencidos de que tenemos una gran tarea por delante”, destacó Merz.
“Hemos dado un primer paso”, declaró por su parte el copresidente del SPD, Lars Klingbeil.
En cuanto a los detalles, los dos partidos lograron superar sus diferencias en temas migratorios, indicó Merz.
Así el SPD aceptó una propuesta controvertida de los conservadores respecto al refuerzo de los controles fronterizos “de acuerdo con los socios europeos” y la devolución de extranjeros sin papeles.
Por su parte, los socialdemócratas impusieron su demanda de aumentar el salario mínimo a 15 euros, precisó Klingbeil.
Los socios sorprendieron al acordar esta semana un gran programa de inversiones destinado al rearme y las infraestructuras.
Las discusiones para crear un nuevo gobierno están siendo seguidas de cerca por los vecinos europeos, quienes esperan que Alemania, bajo el paraguas estadounidense desde la posguerra, desempeñe un papel más importante en cuestiones de seguridad y defensa.