Publicado: febrero 8, 2025
El cierre de rellenos sanitarios agrava la crisis de residuos en el país
La basura generada por tres millones de personas en la Gran Área Metropolitana (GAM) está siendo trasladada a Aserrí y Limón, tras el cierre del Parque Ambiental La Uruka, ubicado en La Carpio. Esta medida ha generado una creciente preocupación entre comunidades y autoridades debido al impacto ambiental, social y económico que representa.
El impacto del traslado de desechos hasta Limón
Los residuos provenientes de San José, Alajuela, Heredia y Cartago ahora recorren más de 100 kilómetros hasta llegar a su destino final en El Tomatal, en Santa Rosa de Limón.
Este traslado ha sido calificado como una injusticia ambiental por la alcaldesa de Limón, Ana Matarrita McCalla, quien lamenta que su comunidad esté siendo vista como un «vertedero» para solucionar el problema de la GAM.
A pesar del mayor costo operativo que implica esta nueva ruta, la empresa EBI, encargada de la gestión de residuos en más de 35 municipalidades, ha asumido temporalmente el financiamiento de esta medida. Sin embargo, advierte que la situación no será sostenible a largo plazo.
Nuevas tarifas en el horizonte: ¿quién pagará la cuenta?
EBI anunció que próximamente licitará un servicio de traslado de residuos, lo que implicará un aumento en las tarifas para las municipalidades y, posiblemente, para los ciudadanos.
“Debido a la crisis nacional de residuos sólidos, se abrirá un nuevo servicio de traslado que será sometido a licitación pública. Esto representará un mayor costo logístico y operativo, ya que el transporte hasta Limón incrementa significativamente los gastos”, explicó la empresa.
Este anuncio ha generado inquietud en alcaldías y vecinos, quienes temen un incremento en el cobro de los servicios de recolección.
Falta de rellenos sanitarios y el estancamiento del proyecto de regionalización
La ministra de Salud, Mary Munive, advirtió que la situación actual es consecuencia de una crisis que se veía venir. A pesar de los esfuerzos por extender la vida útil de rellenos sanitarios como El Huazo, la falta de sitios de disposición final dentro de la GAM ha llevado a tomar decisiones extremas.
“El problema no es solo trasladar la basura más lejos. Entre más distancia recorren los residuos, más alto será el costo, lo que afectará los futuros contratos de recolección y disposición final. No tenemos lugares adecuados para la basura”, enfatizó Munive.
Además, la ministra señaló que la solución a largo plazo está frenada por la falta de avances en el proyecto de regionalización de residuos, que permitiría la creación de nuevos sitios de disposición sin depender de la aprobación de los gobiernos locales.
Posibles soluciones: ¿qué proponen las municipalidades?
La Unión Nacional de Gobiernos Locales (UNGL) sostuvo una reunión con EBI para discutir soluciones viables. La presidenta de la organización, Patricia Porras, aseguró que las municipalidades están trabajando para encontrar una alternativa sostenible que permita manejar la basura sin recurrir a traslados de larga distancia.
“Estamos comprometidos en hallar una solución inmediata. Sabemos que esta crisis no puede sostenerse a largo plazo”, declaró Porras.
Actualmente, Costa Rica solo cuenta con dos rellenos sanitarios activos con una vida útil mayor a 10 años. No obstante, el caso de El Huazo demostró que estas estimaciones pueden cambiar rápidamente. En apenas seis meses, su proyección de funcionamiento pasó de 11 años a solo 3,5, debido al incremento acelerado en el volumen de desechos recibidos.
FUENTE DIARIO EXTRA