Un negociador israelí dijo a la AFP el lunes que decenas de rehenes retenidos por Hamás en la Franja de Gaza están vivos y que Israel no puede aceptar un cese al fuego hasta que todos los rehenes sean liberados.
“Decenas están vivos”, dijo el negociador, bajo condición de anonimato, quien advirtió que es vital para ellos “no dejarlos allí demasiado tiempo”.
De las 251 personas que fueron secuestradas durante el ataque del movimiento islamista palestino Hamás en Israel el 7 de octubre, 116 siguen retenidas en Gaza como rehenes, y de estas, 41 habrían muerto, según el ejército israelí.
Tras más de ocho meses de guerra, Estados Unidos está tratando de obtener un acuerdo, a partir de una propuesta presentada a finales de mayo por el presidente estadounidense Joe Biden. Este plan prevé, en una primera fase, un alto el fuego de seis semanas acompañado de una retirada israelí d las zonas densamente pobladas de Gaza, así como la liberación de algunos rehenes retenidos en Gaza y la puesta en libertad de palestinos detenidos por Israel.
Las negociaciones no parecen avanzar y el negociador israelí reiteró que Israel se niega a aceptar inmediatamente un alto el fuego permanente.
“No podemos, en estos momentos — antes de firmar un acuerdo –, comprometernos a poner fin a la guerra”, declaró el funcionario.
“Porque durante la primera fase hay una cláusula según la cual tenemos que negociar [asuntos] de la segunda fase. La segunda fase es la liberación de los […] rehenes”, explicó.
La fuente indicó que el equipo de negociadores israelíes había dado su visto bueno al plan de Biden pero que el gobierno israelí todavía no lo había hecho.
“Esperamos que Hamás diga que sí”, afirmó, pese a que el movimiento islamista continúa pidiendo un alto el fuego permanente antes de firmar cualquier acuerdo sobre la liberación de rehenes (a cambio de la liberación de palestinos detenidos por Israel).
“Si no logramos un acuerdo con Hamás, [el ejército israelí] continuará luchando en la Franja de Gaza, y no con menos fuerza de lo que lo hace actualmente”, añadió. “De otra manera, pero intensamente”.
La guerra estalló el 7 de octubre, cuando milicianos del movimiento islamista mataron a 1.194 personas, en su mayoría civiles, según un recuento basado en datos oficiales israelíes.
En respuesta al ataque del 7 de octubre, Israel lanzó una ofensiva que ha dejado al menos 37.347 muertos en Gaza, también civiles en su mayoría, según el Ministerio de Salud del territorio palestino, gobernado por Hamás.