El caso de los primos Barboza ha estremecido a la provincia de Heredia y al país entero. Carlos Alberto Barboza Chacón, de 32 años, y Jorge Humberto Barboza Abarca, de 33, desaparecieron el pasado 6 de febrero tras ingresar al bar Dude’s, ubicado a 75 metros de la Universidad Nacional (UNA). Desde entonces, sus familias no supieron más de ellos.
El Organismo de Investigación Judicial (OIJ) confirmó que, tras días de incertidumbre, los cuerpos de ambos fueron encontrados enterrados en el sótano del local. La escena fue descubierta en la noche del martes 11 de febrero, cuando agentes judiciales ingresaron al establecimiento con picos y palas para realizar la inspección.
Detalles del hallazgo
El director del OIJ, Randall Zúñiga, explicó que los cuerpos fueron ocultados en una fosa de 1,60 metros de profundidad, dentro del bar. Al parecer estas fosas habían sido cavadas por los propios sospechosos, sin imaginar que en tan solo días la policía los iba a descubrir.
Al extraerlos, los forenses constataron que ambos presentaban múltiples golpes y que al menos uno tenía heridas de arma punzocortante.
Los cadáveres fueron trasladados al Complejo de Ciencias Forenses en San Joaquín de Flores, donde se realizarán los análisis para esclarecer las causas exactas del fallecimiento.
Detenidos y línea de investigación
Durante el operativo en el bar, cuatro personas fueron arrestadas como sospechosas del crimen:
• Guzmán, de 22 años.
• Palacios, de 19 años.
• Bonilla, de 23 años.
• Gutiérrez, mujer de 26 años.
Las autoridades presumen que el asesinato ocurrió tras un altercado dentro del establecimiento, el cual escaló hasta un nivel de violencia extrema.
“El caso es realmente macabro. No solo se dio una agresión fatal, sino que además las víctimas fueron sepultadas dentro del mismo local, lo que demuestra una frialdad y una falta de control social preocupante”, señaló Zúñiga.
Un llamado a la justicia
Carlos y Jorge Humberto eran padres de familia. Carlos deja una hija de 4 años, mientras que Jorge era padre de dos menores de 9 y 6 años. Sus familiares y amigos piden justicia, mientras las autoridades continúan reuniendo pruebas para esclarecer este atroz crimen.
